En protesta por la vigilancia civil, la facción Azaladshu Free, que controla cuatro sistemas, se escinde de la Federación.
La inesperada declaración tuvo lugar tras la elección del alto cargo de Azaladshu Free, que actualmente controla los sistemas Azaladshu, LFT 824, LHS 277 y LTT 3919.
La alcaldesa Constanza Noguera ha anunciado:
"La Federación se ha vuelto corrupta, autoritaria y poco fiable. Las leyes de vigilancia pública para espiar a personas inocentes son intolerables. A partir de ahora, gobernaremos nuestros sistemas como naciones soberanas e independientes".
Los comentaristas políticos creen que hay más facciones federales planeando declarar también la independencia. Todas ellas se encuentran dentro del campo de influencia de Felicia Winters, líder de la oposición, aunque esta ha negado públicamente su apoyo a tales acciones.
Tras declarar ilegal esta secesión, de conformidad con el Acuerdo Federal, el Congreso ha ordenado a Azaladshu Free que retomen su condición de membresía normal. La Armada Federal y demás organizaciones militares ya están en alerta.
El presidente Hudson ha reaccionado de forma enérgica, emitiendo las siguientes declaraciones: "Este nivel de conducta criminal organizada demuestra la necesidad de que exista el Departamento de Detección Preventiva para mantener el orden".
Por su parte, la líder de la oposición Winters ha contraatacado con la siguiente afirmación: "Dejar a nuestros ciudadanos sin derecho a la privacidad es la causa de esta rebelión, no la solución".
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